En el taco
[Esto corresponde a una anotación en mi agenda, del 7 de febrero]
Unas veces me siento
como pobre colina
y otras como montaña
de cumbres repetidas.
Siendo coherente con mi filosofía de encontrar el aspecto amable, sacar lo bueno de todo, me relajo en el taco y empiezo a disfrutar de las bondades de vivir en Santiago. Miro por la ventana el paisaje y tengo la fortuna de quedar frente a un trozo mustio de pasto, heredero incólume de alguna reencarnación de plaza, con una palmera patética, fruto de un paisajista que tuvo sueños trasnochados con Miami.
La palmera tiene 7 hojas, bien podría tener 100... llevo casi 10 minutos mirándola.
Comienza mi listado de ventajas...
Se terminaron las obras en la fecha prometida, y tuve al tremenda dicha de ver como los tacos desaparecieron en el centro... para irse a instalar al frente de mi casa. Eso me abre un universo de nuevas posibilidades de ver lo lindo de la vida.. desde la emoción de ver como pasan haciendo carrera los choferes por mi pasaje hasta la capacidad de aspirar humo solo abriendo la ventana
Unas veces me siento
como pobre colina
y otras como montaña
de cumbres repetidas.
Siendo coherente con mi filosofía de encontrar el aspecto amable, sacar lo bueno de todo, me relajo en el taco y empiezo a disfrutar de las bondades de vivir en Santiago. Miro por la ventana el paisaje y tengo la fortuna de quedar frente a un trozo mustio de pasto, heredero incólume de alguna reencarnación de plaza, con una palmera patética, fruto de un paisajista que tuvo sueños trasnochados con Miami.
La palmera tiene 7 hojas, bien podría tener 100... llevo casi 10 minutos mirándola.
Comienza mi listado de ventajas...
- La vista... obviamente tenia que empezar con la ventaja evidente. Podría sacar fotos con trípode sin miedo que salgan corridas.
- La capacidad de instrospección.. claro... con tanto tiempo para pensar, se tiene que hacer algo.
- Escribir... mi agenda se llena de palabras quietas, algo dificil de hacer con la micro en movimiento.
- Leer... llevo ya 300 páginas de ese aburrido libro de gestión que pense que nunca leería.
- La capacidad de conocer gente, como ese libro que lei alguna vez (creo que de Garcia Marquez) donde la gente se conocía, se amaba y llegaban a tener hijos, antes que terminara el taco, he tenido la oportunidad de conversar con choferes y sufridos viajeros, que luego de la furia pasan a la resignación.
- Paz interior... es una oportunidad única para trascender el cuerpo.. ir más allá de los furiosos bocinazos, los gritos de los choferes, los atropellamientos, los atrasos, la desesperación.. y encontrar esa necesaria paz interior... para gritarle un par de buenas chuchadas al chofer, al sistema y toda la maldita sociedad que me tiene metido en este taco por casi 2 horas!
Ahora pienso que va a ser una tremenda pérdida, cuando entreguen las obras en marzo.
Epílogo
A mi lista tengo que agregarle algo... - Ejercicios.. he tenido la oportunidad de caminar 3 kilómetros y disfrutar viendo como demoro media hora solamente en llegar a mi casa, en vez de la hora que demoran mis vecinos. Llego algo embarrado y un poco cansado, pero feliz de ver que todavía puedo hacerlo.
Se terminaron las obras en la fecha prometida, y tuve al tremenda dicha de ver como los tacos desaparecieron en el centro... para irse a instalar al frente de mi casa. Eso me abre un universo de nuevas posibilidades de ver lo lindo de la vida.. desde la emoción de ver como pasan haciendo carrera los choferes por mi pasaje hasta la capacidad de aspirar humo solo abriendo la ventana
Me alegra saber que no soy la única que se disfruta los tacos :)
Quizás nos quedan pocos momentos en los que podamos pensar tan largamente... y mi lema también es ¡sacar lo bueno de todo!
¡Saludos y nos leemos! :)
Fue lo que dijo Ma®ía Pastora | 11 abril, 2005 12:25
En uno o dos tacos me leí las Fantasías Sexuales de las chilenas, ese de la Jiles. Escucho la Concierto, no hay mejor, hablo por teléfono, no de trabajo, sino con los que nunca llamo. Todo siempre tiene un lado bueno.
Ojalá aparezca la Palm. Somo esclavos de los gadgets. Ni pensar en perder la mía. Uf, no.
Saludos clever cainista.
Fue lo que dijo Roberto Arancibia | 11 abril, 2005 13:47
Da gusto leer a alguien que se tome la parte funesta de la vida con humor. Respecto a las micros, suguero sin ninguna clase de militancia el uso de la bicicleta y los pies. Otra cosa: ojalá nos demos cuenta alguna vez que tal vez el principal problema que tenemos los santiaguinos es nuestro asqueroso sistema de transporte. Si un candidato lo soluciona, me afilio a su partido ipso facto. Saludos, buen blog.
Fue lo que dijo Anónimo | 14 abril, 2005 16:38