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Me gusta leer


Lo declaro abiertamente, mi vicio más antiguo, el primero y el más profundamente arraigado. (No sería el único ni el último)
Me gusta leer.
Y con eso no quiero decir que me gusta Shakespeare o Quevedo, Martí o Keats.
Leo de todo, desde el periódico de la mañana hasta las recetas en la parte de atrás de los caldos de sopa.

Puedo leer a Dan Simmons en la mañana, seguir con Mark Twain a mediodia y cerrar la noche con una poesía de Mario (lo leo demasiado para decirle Benedetti)
Y despertar matando neuronas con Corin Tellado, seguir leyendo la Cuarta (el diario popular) y relajarme leyendo el Mio Cid (pero en castellano antiguo)

No tengo filtros, mis ojos se mueven con voluntad propia y siempre.. siempre, estoy leyendo algo, en ese sentido soy un promiscuo de la palabra.

No quisieras aburrirlos como mis primeros años.. pero lo haré!
De como aprendí a leer en 1 semana, desesperado por conocer lo que se escondía en apretada caligrafía, en libros y carteles en mi escuela primaria.
Como mi primer libro lo encontré en la basura, y 20 años más tarde, la mujer de mi vida lo rescataría, esta vez nuevecito en una librería para regalarmelo. Marco Polo, con sus viajes me transportó al Oriente, lleno de magos y reyes poderosos.
Luego lucharía al lado de Sandokan en versión de bolsillo y saltaría a las aguas del Missisipi para acompañar a Tom Sawyer y Huckleberry Finn en la busqueda absurda de un tesoro.
Conoceria el susto de la mano de Edgar Allan Poe, pero conocería el terror en las paginas de Hyperion de la mano de Dan Simmons.

Busque la gloria de la mano de D'Artagnan y los tres mosqueteros, me sorprendí de su audacia en 20 años despues y no pude dejar de llorar su muerte en el Vizconde de Bragelone.

Admire al Mio Cid con esa arrogancia y soberbia del que se sabe superior a los demás hombres, conocí la poesía ruda y franca de Martín Fierro, comparada con la inocencia de un Pablo Neruda de 17 años, enamorado "escribiendo los versos más tristes esta noche"

Y así podría mencionar a miles, dicen que cuando termine de leer los libros de aventura, leí las revistas, y luego los clásicos y luegola ciencia ficción y cuando se termino toda la lectura, me lei por completo la enciclopedia
Eso, por supuesto, es falso, no leí la enciclopedia, sólo llegue hasta la "C" (cizaña)

Por supuesto, tuve favoritos. Juan Salvador Gaviota, lo leo cada vez que puedo, ya lo debo haber leído mil veces. El principito me hace llorar y me enseña algo nuevo en cada lectura.
Mario, que parece que cada poema, cada cuento, cada trozo de escritura, fuera de alma, nube y fuego.
Y otros que resulta casi imposible de enumerar, el Mio Cid, los robots de Isaac Asimov, la social ficción de Ray Bradbury, la acción de Tom Clancy, la SF de Clifford D. Simak, Arthur C. Clarke, Poul Anderson, Philip K. Dick, Theodore Sturgeon y sus cuentos mágicos, Tanner, Larry Niven, Harlan Ellison y un largo etcetera.

Mis papas me decían que no leyera tanto! que me iba a volver como el Quijote, es un vicio que gusta y que asusta.
Me leí el Quijote en español antiguo, de la mano del manco de Lepanto.
Hay que estar enfermo para hacerlo... yo tenia paperas y 2 aburridas semanas en cama para acometer la tarea.
Y tenían razón.. los padres suelen tenerla.. me volví un Quijote.
Y ando por la vida buscando "deshacer agravios y enderezar entuertos."

Así me arme una colección interesante, un par de cientos libros en papel y casi 100 mil libros electrónicos (el que quiera un libro, que me lo pida .-)

Me retiro... pero dejo para que lean, el cuento del escritor que más admiro.
Y si me preguntan... el mejor regalo, un libro.

Salvo excepciones
En la sala repleta circuló un aire helado cuando don Luciano, con todo el peso de su prestigio y de su insobornable capacidad de juicio, al promediar su conferencia tomó aliento para decir: «Como siempre, quiero ser franco con ustedes. En este país, y salvo excepciones, mi profesión está en manos de oportunistas, de frívolos, de ineptos, de venales».
A la mañana siguiente, su secretaria le telefoneó a las 8: «Don Luciano, lamento molestarlo tan temprano, pero acaban de avisarme que, frente a su casa, hay como quinientas personas esperándolo».
«¿Ah si?», dijo el profesor, de buen ánimo. «¿Y qué quieren?. Según dicen, se proponen expresarle su saludo y su admiración».
«Pero ¿quiénes son?»
«No lo sé con certeza, don Luciano. Ellos dicen que son las excepciones».

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Ay amigo mío...usted y sus vicios, je je.
Este de leer al menos, me encanta.
Un abrazo.

¡Qué bien! Otro vicioso más. Unos amigos y yo hemos empezado un blog multilingüe sobre los libros que leemos. Nos encantarían tus comentario, y claro sólo avísa si quieres aportar entradas.

www.BookwormCircle.com

pasa por este blog! estoy promocionando un nuevo libro.. saludos!

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Del Escritor

  • Es Cainista
  • Escribiendo desde el ombligo
  • Creo que la verdad es una mujer muy fea, que las palabras lindas no siempre son ciertas, que lo cierto no siempre lastima y que hablar bonito no significa hablar bien. No busco la felicidad si se esconde detras de una mentira.
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